Universidad Pablo de Olavide
INTRODUCCIÓN
“nueva universidad a cuyo diseño quiso
incorporarse el espíritu de reforma y transformación que caracterizó a la
generación de la Ilustración en España y América a finas del siglo XVIII, y uno
de cuyos máximos exponentes en Andalucía fue sin duda el peruano Pablo de
Olavide”[1].
“la primera institución pública de enseñanza
superior en toda Europa que llevaba el nombre de un americano, la universidad
homenajeaba a este grupo de científicos, escritores, pensadores o artistas, que
constituyeron uno de los movimientos más interesantes en cuanto a la creación
de pensamiento en la España moderna”[2].
“<<espíritu Olavide>> que
pretendía desde un análisis mesurado y constructivo de las distintas realidades
universitarias […], introducir nuevos parámetros de estudio y vislumbrar nuevas
perspectivas en el desarrollo dese el que trabajar en procura de ese ideal de
reforma y transformación. En homenaje a ese grupo, a esa generación de
ilustrados españoles y americanos, luego barridos de la memoria colectiva por
casi dos siglos de intolerancia, de retraso, de oprobiosa pérdida de libertad
para pensar, para analizar, para reflexionar, para construir presente y futuro,
decidimos que las calles, plazas y edificios de la universidad llevasen sus nombres:
Blanco White, Goya, Cadalso, Malaspina, Mutis, Aranda, Jovellanos, Campomanes,
Féliz de Azara, Elhuyar, Miranda, Ayala, Francisco José de Caldas… jalonan el
llamado Pasaje de la Ilustración. Un recorrido por una generación de cuyas
biografías se deduce el esfuerzo por desarrollar el conocimiento, la ciencia,
la técnica y el pensamiento en España y América, y el trágico final que
tuvieron la mayoría de ellos, desde Pablo de Olavide, artífice en buena medida
de una Andalucía más moderna en tiempos difíciles, hasta los científicos,
planificadores, analistas, juristas, universitarios todos que con su esfuerzo y
trabajos concibieron una España mejor, sus nombres, rescatados de un forzado e
injusto olvido, son un tributo a los hombres y mujeres que, desde el estudio y
el pensamiento, crearon, crean y crearán con su esfuerzo, su esperanza y su
trabajo el progreso de la humanidad”[3].
UNIVERSIDAD "PABLO DE OLAVIDE"
Pablo de Olavide en
sus años de Asistente de Sevilla.
Nació en Lima, capital
del virreinato del Perú. Hijo primogénito del comerciante Martín de Olavide
-uno de los más importantes miembros del Comercio de la ciudad, que había
ejercido además numerosos cargos públicos- y de Doña María Ana de Jáuregui,
hermana del mismísimo Señor Virrey Don Agustín de Jáuregui[4].
Estudió con los jesuitas, doctorándose precozmente y llegando a ser catedrático
de Teología a los 17 años. Poco más tarde fue nombrado Oidor en la Audiencia de
Lima, uno de los cargos con más prestigio y poder de Perú. Tras el terremoto
que destruyó la capital limeña en 1746 mostró sus habilidades gestoras y por
ello fue comisionado oficialmente para que dirigiera las tareas de
reconstrucción[5].
La conjunción de su juventud con su labor innovadora y las deudas heredadas,
hicieron que fuera acusado de malversación de fondos y tuvo que huir precipitadamente.
Durante dos años anduvo por el Caribe hasta que, en 1752 recaló en Cádiz,
reclamado por la justicia española. Tras una breve estancia en Sevilla, llegó a
Madrid, donde fue encarcelado y embargados sus bienes[6].
Sus maneras elegantes y
cultas, su selecta educación limeña, sus lecturas refinadas y su porte de
señorito distinguido, constituyeron el capital que hábilmente invirtió en una
aburridísima Madrid donde algunas familias quedaron deslumbradas por la
galanura y esmero del peruano[7].
Logró conquistar a una rica viuda que le entregó toda su fortuna. Esto le
permitió viajar por Europa, viviendo durante ocho años en Francia, donde fue
huésped de Voltaire y se sumó a las ideas progresistas de los grandes
filósofos. Volvió a España en 1765, con un gran bagaje cultural y miles de
libros, que fueron minuciosamente revisados por inquisidores. Con esta fama y
dineros Olavide obtuvo el “olvido y perdón Reales” en 1757, cerrándosele todas
las causas pendientes[8].
Consiguió trabar amistad con las altas esferas de la corte, Aranda y
Campomanes, quienes aprovecharon sus dotes de persuasión, organización y mando
para, tras el motín de Esquilache, encargarle la creación del Hospicio de San
Fernando, para pobres de solemnidad, y promoverle al cargo de síndico personero
de Madrid[9].
Cumplió sus encargos tan
a satisfacción del gobierno que llegó a Sevilla investido de los máximos
poderes políticos y militares. Era un desafío a las autoridades locales, que él
hizo extensivo al estamento eclesiástico y a las inveteradas tradiciones
populares, cuya importancia no supo calcular. Fue acusado ante la Inquisición
por los celos vigilantes de la moral y de las piadosas tradiciones sevillanas.
Su proceso duró casi tanto como su vida política. Fueron llamados a declarar,
entre amigos y enemigos, todos varones, las más representativas personalidades
de Sevilla y de las poblaciones de Sierra Morena. Aun siendo esta etapa la más
brillante de su carrera, fue la que le condujo a las cárceles de la
Inquisición, a la desgracia y al destierro. Encarcelado, humillado, abandonado,
huido y perseguido, volvió a Francia con la aureola de víctimas de la
intolerancia eclesiástica, siendo aclamado como uno de los más eminentes
mártires del Santo Oficio de la Inquisición[10].
Vivió sus últimos años
sin más consuelo que la visita diaria a la catedral, donde reposaban los restos
de su pasión escondida, su prima hermana Gracia de Olavide[11].
BIBLIOGRAFÍA:
Marchena Fernández,
Juan, (2000) Pablo de Olavide: el espacio de la ilustración y la
reforma universitaria: vida y obra de un ilustrado americano y español,
Sevilla: Universidad Pablo de Olavide. URL permanente: https://athenea.upo.es/record=b1012555~S1*spi
Perdices Blas, Luis,
(1995), Pablo de Olavide (1725-1803): el Ilustrado, Madrid:
Editorial Complutense, 1995. URL permanente: https://athenea.upo.es/record=b1029239~S1*spi
---
Marchena Fernández,
Juan, (2001) El tiempo ilustrado de Pablo de Olavide: vida, obra y
sueños de un americano en la España del S. XVIII, ---: Ediciones Alfar.
Aguilar Piñal,
Francisco (2003) “Pablo de Olavide y Jáuregui” en Andalucía en la historia,
Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra Morena, pp.
9-15.
Marchena Fernández,
Juan (2003) “Pablo de Olavide y la universidad” en Andalucía en la
historia, Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra
Morena, pp. 40-41
[1] Marchena Fernández, Juan (2003) “Pablo de Olavide y la
universidad” en Andalucía en la historia,
Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra Morena, p. 40.
[2] Marchena Fernández, Juan (2003) “Pablo de Olavide y la
universidad” en Andalucía en la historia,
Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra Morena, pp.
40-41.
[3] Marchena Fernández, Juan (2003) “Pablo de Olavide y la
universidad” en Andalucía en la historia,
Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra Morena, pp.
40-41.
[4] Marchena Fernández, Juan, (2000) Pablo de Olavide: el espacio de la ilustración y la reforma
universitaria: vida y obra de un ilustrado americano y español, Sevilla:
Universidad Pablo de Olavide, p. 23.
[5] Marchena Fernández, Juan, (2000) Pablo de Olavide: el espacio de la ilustración y la reforma
universitaria: vida y obra de un ilustrado americano y español, Sevilla:
Universidad Pablo de Olavide, p. 24.
[6] Aguilar Piñal, Francisco (2003) “Pablo de Olavide y
Jáuregui” en Andalucía en la historia,
Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra Morena, p. 10.
[7] Marchena Fernández, Juan, (2000) Pablo de Olavide: el espacio de la ilustración y la reforma
universitaria: vida y obra de un ilustrado americano y español, Sevilla:
Universidad Pablo de Olavide, p. 32.
[8] Marchena Fernández, Juan, (2000) Pablo de Olavide: el espacio de la ilustración y la reforma
universitaria: vida y obra de un ilustrado americano y español, Sevilla:
Universidad Pablo de Olavide, p. 34.
[9] Aguilar Piñal, Francisco (2003) “Pablo de Olavide y
Jáuregui” en Andalucía en la historia,
Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra Morena, pp.
10-11.
[10] Aguilar Piñal, Francisco (2003) “Pablo de Olavide y
Jáuregui” en Andalucía en la historia,
Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra Morena, p. 11.
[11] Aguilar Piñal, Francisco (2003) “Pablo de Olavide y
Jáuregui” en Andalucía en la historia,
Nº. 3, ejemplar dedicado a Olavide y la colonización de Sierra Morena, p. 11.